Con motivo de la Solemnidad de San José, este 19 de marzo, el presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, ha compartido un video-mensaje en el que evoca el testimonio de santidad y de fidelidad creativa de San José, como uno de los más sobresalientes en las Sagradas Escrituras, si bien es “una de las historias más discretas de los Santos Evangelios”.

“Hombre justo”
A San José lo reconocemos como ‘hombre justo’, carpintero de oficio, siempre obediente a los designios de Dios, incluso en los momentos de dificultad e incomprensión, asumiendo los caminos que el Señor le iba mostrando”, ha recordado el Presidente del CELAM, subrayando que no solo asumió la paternidad de Jesús y la defensa de su vida, lo mismo que la de María, su esposa, sino que también “tuvo la valentía de migrar a Egipto para salvaguardarlos de la persecución de los poderosos de su tiempo”.

Y sin embargo, San José “permaneció en el anonimato, en la sencillez, como lo hacen tantas y tantos hermanos nuestros que durante estos difíciles tiempos de pandemia dan su vida por los demás”, agregó Mons. Cabrejos, animando al pueblo de Dios a seguir el ejemplo de este gran santo, y a pedir su intercesión “para que nos conceda la gracia de las gracias: la conversión permanente”, como ha propuesto el Papa Francisco en su Carta Apostólica ‘Patris Corde’.

Testimonio vivo
La vocación de San José, su silencio y su perseverancia, siempre abierto a los signos de Dios y “disponible a su proyecto, y no tanto al propio”, es, según el prelado, un testimonio vivo que nos alienta “a ser, como él, custodios de la vida que nos ha sido confiada: la de nuestras familias, la de nuestros hermanos y hermanas más necesitados, la de la Creación”, y nos enseña “a ser una Iglesia en salida, itinerante, para cumplir mejor los designios de Dios”.

Por la intercesión de San José, el CELAM manifiesta su deseo de “ser fieles a este llamado, como Iglesia en salida, servidora de los pobres, comprometida con las periferias geográficas y existenciales de nuestros hermanos y hermanas en nuestro continente”.

Con una petición a San José, Patrono de la Iglesia, para que “nos dé la gracia de ser testigos de esperanza”, Mons. Miguel Cabrejos concluye su mensaje.

Fuente: Prensa CELAM