La Arquidiócesis de Tunja sigue trabajando a favor de las familias más vulnerables de la ciudad y municipios aledaños. Desde hace aproximadamente 10 años esta jurisdicción eclesiástica, a través de la Pastoral Social Arquidiocesana, ha entregado alimentos a 320 hogares urbanos y rurales por medio de las parroquias, también se les ha brindado formación humana y espiritual, se atiende a la población migrante venezolana y se trabaja en la formación y fortalecimiento de los Comités de Pastoral Social.
“Las acciones del Banco de Alimentos se han intensificado con motivo de la pandemia. Desde el 20 de marzo se ha venido entregando alimentos por parroquias y sectores llegando a los más vulnerables, esto es gracias a personas e instituciones que han estado colaborando, como el Banco de Alimentos de Bogotá y empresas como Éxito, Pony Malta, Postobón, Mac Pollo y demás”, asegura el padre Marco Antonio Gil Jerez, director de la Pastoral Social Arquidiocesana de Tunja y del Banco de Alimentos.
Para todo este proceso, los beneficiarios deben primero llenar una encuesta en donde suministran datos personales e información familiar, es decir, cuántas personas tienen a cargo, cuántos son niños o adultos mayores, estrato socio económico, entre otros; posteriormente, se realizan grupos en donde se les está brindando formación en bioseguridad para que las personas puedan aprender técnicas de autocuidado que eviten el contagio del virus Covid-19 y se les entrega tanto ayuda alimenticia, como semillas para que elaboren sus huertas caseras y puedan autoabastecerse.
Para el padre Marco Gil “el objetivo es poner en práctica la caridad y la solidaridad, sirviendo a Cristo, llegar entre los pobres a los más pobres. Es difícil porque hay muchas personas que piden en todas partes sin necesitarlo, por eso llegamos a través de los párrocos, ellos conocen sus comunidades y saben quiénes lo necesitan”.
Para que estas actividades se puedan llevar a cabo han participado los colabores de la Pastoral Social y el Banco de Alimentos, que, debido a las circunstancias, son entre dos y tres personas, ya que la Arquidiócesis respeta las medidas de aislamiento preventivo decretadas por el Gobierno Nacional y Local. Asimismo, los integrantes de los Comités de Pastoral Social apoyan a los párrocos en la organización y entrega de mercados.
“Es importante resaltar también la labor del arzobispo Gabriel Ángel Villa, él llegó cuando iniciaba la emergencia sanitaria y le ha hecho frente a la situación, con el Banco de Alimentos de Medellín nos ayudó y recibimos unas seis toneladas de alimentos, él está muy atento a lo que se está realizando desde la Pastoral Social en este tiempo de pandemia”, comentó el padre Marco Gil.
El acompañamiento espiritual se está haciendo cuando se visita a los grupos de personas que recibirán la ayuda, primero se realiza una oración y se les invita a ser parte de la celebración de la Santa Eucaristía por medio de plataformas digitales. Asimismo, se les motiva a participar en la preparación de las fiestas de la Virgen del Carmen y de Santiago Apóstol patrono de Tunja.
A través de una emisora, el padre Marco Gil llega a los sectores rurales con una oración y reflexión, también les da ánimo y fe a las personas que se han visto afectadas por la situación de la pandemia. “En Dios todo lo podemos y necesitamos creer, pero también actuar, en estos momentos coyunturales de la historia humana, necesitamos poner nuestra esperanza y confianza en Dios. También debemos mantener todos los cuidados y protocolos de bioseguridad, así saldremos triunfantes de esta pandemia”.
Fuente: Oficina de Comunicaciones del Secretariado Nacional de Pastoral Social